Sin aire.
Decidí marchar y con ello me lleve todos mis sentimientos, los metí en la maleta y zarpé rumbo a ningún lado; pues no fui yo quien decidió que tenia que irse, sino él quien me echó de su vida sin ninguna excusa mas que un simple no quiero hacerte daño..
Mi dolor, mi rabia, mi resentimiento, se hicieron uno y formaron parte de mi muchos años , me convertí en una fiera, buscando con ansia el poder;busqué ser deseada por cualquier hombre, y lo conseguí, aunque nunca por el que yo quise.
Nunca volví a verlo, pero estoy orgullosa de haberlo intentado hasta el último suspiro, porque algunas veces la belleza está en intentarlo...
En las noches me rodeé de las mejores fiestas, los hombres más ricos y las sábanas de cualquier lugar, pues estaba vacía por dentro, con un corazón hueco y miles de sentimientos desperdigados por el suelo...
Me convertí en un vampiro en el que la noche y el placer de lo prohibido se apoderaban de mi, rasgando en lo mas profundo de mis entrañas. No sé cuantas historias dejé sin terminar, ni cuantas lágrimas deje en el camino escondida para que nadie me viera, pero un día me di cuenta que había fantasmas en los ojos de los chicos a los que rechazé, y que esos fantasmas me habían convertido en uno de ellos, sin sentimientos, sin ilusión sin ganas de vivir...y fue ahí cuando dando vueltas en los escombros de mi mente sucia encontré abandonada a esa niña que un día fui, llorando, desconsolada, pidiéndome que me volviera a enamorar...
Mi dolor, mi rabia, mi resentimiento, se hicieron uno y formaron parte de mi muchos años , me convertí en una fiera, buscando con ansia el poder;busqué ser deseada por cualquier hombre, y lo conseguí, aunque nunca por el que yo quise.
Nunca volví a verlo, pero estoy orgullosa de haberlo intentado hasta el último suspiro, porque algunas veces la belleza está en intentarlo...
En las noches me rodeé de las mejores fiestas, los hombres más ricos y las sábanas de cualquier lugar, pues estaba vacía por dentro, con un corazón hueco y miles de sentimientos desperdigados por el suelo...
Me convertí en un vampiro en el que la noche y el placer de lo prohibido se apoderaban de mi, rasgando en lo mas profundo de mis entrañas. No sé cuantas historias dejé sin terminar, ni cuantas lágrimas deje en el camino escondida para que nadie me viera, pero un día me di cuenta que había fantasmas en los ojos de los chicos a los que rechazé, y que esos fantasmas me habían convertido en uno de ellos, sin sentimientos, sin ilusión sin ganas de vivir...y fue ahí cuando dando vueltas en los escombros de mi mente sucia encontré abandonada a esa niña que un día fui, llorando, desconsolada, pidiéndome que me volviera a enamorar...
Increíble la entrada y lo mejor el final, me encanta :)
ResponderEliminarSin comentarios :):)
ResponderEliminariloveit