Me sobran los motivos...

Hace unos días me encontré en un callejón, perdida sentimentalmente, abandonada por todo aquello que quiero. A lo lejos se acerco una hombre mayor y me preguntó el  porque de mi estado. Le dije la verdad, que lloraba por un hombre, por un amor, por una historia... Y nadie me había dejado las cosas tan claras nunca, me dijo que fuera la protagonista de mi propia historia, que dejara de ser la amiga de la chica. Unas quince palabras que hicieron que mi vida diera un giro de 180 grados provocando en mi ese éxtasis de ideas que necesitaba. Como una vez dijo Einstein si quieres resultados distintos, no hagas siempre lo mismo. Y esa frase será la que me guíe en todo lo que haga este año. Porque si quiero luchar, lucharé con el coraje suficiente aun sabiendas que me puedo llevar un golpe duro. Si quiero llorar, lloraré teniendo en cuenta que puedo perder esa coraza da chica dura que tantos años llevo forjando. Si quiero inventar, inventaré aunque sea un mundo nuevo. Si quiero ro

Es fácil atormentarse por las desgracias que trae consigo la vida, es sencillo llorar y más tarde sacudir las lágrimas impregnadas de orgullo y mal intención. La vida es completamente llevadera si la dedicas a ver las desgracias de los demás como triunfos tuyos... Por eso hoy propongo un brindis, que cada uno en su casa coja una copa de champán del caro y brinde por esas personas que siguen y seguirán sonriendo en cualquier momento de su existencia, ante la adversidad, ante cualquier problema. Antes, cada vez que entraba al blog derramaba una lágrima al tener que poner su nombre en la contraseña, hubiera sido fácil cambiarla y así dejar de sentir esa sensación estúpida al entrar, pero a mi no me gusta el camino fácil, yo quería superar ese miedo tan ridículo a no poder ni siquiera pronunciar su nombre. Es sencillo decir me muero de ganas de verte, me muero de ganas de decirte te quiero, pero ya no. Vivimos maldiciendo todo lo que no deseamos, dormimos para que se cumplan nuestros

Hace días una mujer me leyó la mano. Me dijo que en poco tiempo el hombre que hizo vibrar todo mi cuerpo volvería a formar parte de mi vida. Una sensación extraña se apoderó de mi en ese instante. Miedo, placer, odio, amor, pasión, dulzura.  Yo que sé. No quise hacerla caso. Reí y me alejé.  Mientras mis pasos se hacían cada vez mas silenciosos para ella, la intriga más se apoderaba de mi. - Para chiquilla! dijo ella. Confusa me volví. Y ella siguió hablando. - No vuelve para quedarse, si tu no quieres. El destino esta de tu lado. El estará varias horas en el limbo, en la línea entre el amor y la indiferencia. De tu mano está.  No pienses que volverá con un ramo de rosas pidiéndote que le ames para siempre. Simplemente el amor está ahí, aprende a usarlo... Y se marchó. ¿Increíble verdad? Llevo meses intentando hacer desaparecer todo rastro de su existencia... Y ahora aparece la flipada esta y me deja medio trastornada. Pensé que comprándome un par de

Ya no va por ti,  ahora me exprimo a mi misma.   Y quizá no importe que introduzca esto o no, ya que ... Bueno,  ¿Qué más dará?  El caso es que hoy tuve un sueño muy raro.  Demasiado. No sé donde empieza el sueño y donde termina, la sensación es muy extraña. Siempre suelo vivir el sueño en primera persona, siento lo que el personaje siente y lo vivo demasiado. Esta vez fue diferente. Me veía desde fuera. Era de noche. Estaba totalmente perdida por las calles de Sevilla, en pijama, sola, sin poder pedir ayuda a nadie, no podía hablar. Es difícil sacar algo en claro de este sueño, supongo que lo único que pasa es que mi mente me quiere hacer pasar una mala jugada. Sentía los pies mojados. ¿Quien entiende algo de todo esto?...pijama, madrugada, calles mojadas, pies descalzos.... Es triste, acostarte intentando descansar, y levantarte destrozada y sabiendo que mi propia consciencia esta jugando con mis pulsaciones y conquistando mis propios sentidos. En fin, hoy respirar

Pararía el tiempo tan solo para darte el último beso de buenas noches, pararía el tiempo para entrecruzar los dedos en ese último paseo que nunca dimos, pararía el tiempo en el instante que descubrí que te había perdido, pararía el tiempo en aquella milésima de segundo donde tus dedos recorrían mi cuerpo, pararía el tiempo en las largas conversaciones en las que tu hablabas y yo solo escuchaba el latir de tu corazón al mismo ritmo que el mio. Pararía el tiempo una y mil veces, pero la vida sigue... y aunque tu ya no pertenezcas a ella, mi mente, mi alma, mis recuerdos y mis pasiones, pararán el tiempo cada vez que quiera, porque desgraciadamente... Puedo mandar en mi vida, pero nunca en mis sentimientos.

Como un castillo de arena se desvanecía... Era fuerte y consistente, mientras el sol y la calma le rodeaban, no se tambaleaba al mínimo soplo de viento. Necesitaba de algo más fuerte para derrumbarse, el poder del agua, capaz de llevarse recuerdos, pasiones y alegrías en cualquier momento. Llegaba poco a poco, y poco a poco se llevaba todo lo que una vida llevaba construyendo... Cuando el agua lo atravesó por completo, llevándose consigo hasta el último grano de arena se dio cuenta que alguien nuevo llegaría y con amor, esfuerzo y trabajo, recogería todo aquello que una vez el agua se llevó, lo construiría mas grande, con una muralla, incapaz de atravesar, dispuesto a luchar ante la adversidad de todo fenómeno natural... Y es ahí, en esa milésima de segundo, cuando comprendió que aunque lo construyera una y otra vez, de mil maneras diferentes,estaba ligado a permanecer enredado entre los brazos de aquello llamado vida...